Procesos Didácticos del Área de Religión
Enfoque del Área de Educación Religiosa:
Recuerda que el enfoque del área de Educación Religiosa: Enfoques humanista cristiano, cristocéntrico y comunitario.
Competencias:
- Construye su identidad como persona humana, amada por Dios, digna, libre y trascendente, comprendiendo la doctrina de su propia religión, abierto al diálogo con las que le son cercanas
- Asume la experiencia el encuentro personal y comunitario con Dios en su proyecto de vida en coherencia con su creencia religiosa
Procesos Didácticos:
Los procesos didácticos del Área de Religión son un conjunto de actividades y estrategias que se utilizan en la enseñanza y el aprendizaje para facilitar la adquisición de conocimientos, habilidades y competencias por parte de los estudiantes. Estos procesos están diseñados para promover una enseñanza efectiva y significativa, y se centran en la planificación, implementación y evaluación de las actividades educativas.
Los procesos didácticos abarcan diferentes etapas y elementos clave en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Algunos de los componentes fundamentales son:
1. Ver: la realidad.- Se formula preguntas de nivel crítico cuando presenta imagenes o videos o cualquier recurso. Auscultar la realidad: ¿qué está sucediendo? y suscitar actitud crítica y reflexiva: ¿qué sucedió hace tiempo? comparar. Contextualizar con las preguntas: ¿cuál es el problema?, ¿cómo ocurrió?, ¿a quién(es) les ocurrió?, ¿dónde ocurrió?, ¿cuándo ocurrió?, ¿por qué ocurrió este problema?, ¿cuáles son sus causas?, ¿qué sucederá de continuar el problema en el futuro?
2.- Juzgar: a la luz de la fe.- Fundamentar a partir de la sagrada escritura (usar la biblia) y confrontar los contenidos doctrinals con la realidad (citar textos bíblicos para ver lo que puede pasar según la biblia). Es reflexionar y experimentar que la fe en Jesús es radical, no es neutral: supone aceptar su doctrina como un camino de liberación integral frente a un problema.
3.- Actuar: transformar la realidad.- Estimular prácticas de virtudes y valores cristianos y promover la elaboración de compromisos concretos. La acción transformadora es una acción duradera, reflexionada, organizada, con estrategias y prácticas oportunas para el problema (primer momento ver).
4.- Revisar - Evaluar: el camino recorrido.- Retroalimentación y aplicación de lo aprendido a nuevas situaciones. Evaluar el grado de cumplimiento de los objetivos y la forma de asumir responsabilidades. Debemos revisar el grado de solidaridad, los cambios realizados en beneficio de los demás y de uno mismo, las incidencias sociales que tuvo nuestra fe, los niveles de aprendizaje, los logros alcanzados con los compromisos que fueron hechos, tener una actitud humilde para disculparse y enmendar las dificultades que se tuvieron.
5.- Celebrar: la vida transformada. Actitud de oración y liturgia (culto). Las victorias, los logros y fracasos, las alegrías y tristezas, las angustias y esperanzas, la vida del grupo, la penitencia y la conversión ... en todo momento de vida debe estar presente la fe.